En un trágico suceso, Gissel B. I., de 18 años, fue aprehendida por la Policía en la ciudad de Santa Cruz, acusada del asesinato de su propio padre, Eliodoro B. F., de 49 años. Según informes policiales, el hombre fue apuñalado y quemado en el barrio Bobosi.
La Fiscalía Departamental de Santa Cruz anunció que se presentará una imputación por parricidio contra la joven, quien confesó el crimen a los investigadores. El fiscal departamental, Roger Mariaca, mencionó que se está llevando a cabo una investigación exhaustiva para recolectar los elementos de convicción necesarios.
Según los detalles revelados por la investigación, el trágico incidente ocurrió la noche del pasado lunes, luego de que el padre llamara la atención a Gissel por estar con su novio en su habitación. Posteriormente, la joven tomó un cuchillo de la cocina y apuñaló a su padre en su propia habitación.
Después de cometer el crimen, la joven sacó el cuerpo al patio de su domicilio y le prendió fuego. Más tarde, confesó el hecho a su madre, quien alertó a la Policía.
Durante el levantamiento legal del cuerpo, los peritos encontraron fracturas en la frente del hombre. Además, la hija confesó que, al ver que su padre no moría pese a las apuñaladas y los golpes, lo estranguló hasta la muerte.