El brasileño Serginho se despidió este jueves de los jugadores y la hinchada del club Wilstermann. Dijo que «ya no puedo más» y pidió que «alguien haga algo por el club», que se encuentra en una crisis por deudas y pedidos de renuncia de la dirigencia.
«Alguien tiene que hacer algo por este club. Creo que todos esperamos que esto iba a caminar. La cosa no se dio, yo infelizmente no puedo más», dijo Serginho, ídolo de los hinchas rojos, a los medios de comunicación.
Sergio Henrique Francisco, más conocido como Serginho, aseveró que trabajó más de un año sin salario y adelantó que algún momento tendrá que cobrar esa deuda.
«Me deben más de un año de sueldo. Soy claro, no voy a mentir. Me deben, en determinado momento voy a cobrar. Yo trabajé un año sin cobrar y di todo lo que podía dentro la cancha y tengo que tomar esta decisión», indicó.
Lamentó que la actual crisis del club no le permita cumplir su sueño de retirarse jugando en el equipo rojo.
«Infelizmente no me dejan cumplir mi sueño de retirarme en el Capriles, con todo el respeto que tengo con la hinchada, con el club. Infelizmente no me dejaron», dijo.
Gary Soria, presidente del Club y acusado de ser responsable de la crisis, descartó ayer renunciar, a pesar de los pedidos de hinchas y la dimisión de gran parte de su directorio.
