Padres de familia de niñas que cursan el segundo curso de primaria de una unidad educativa de Tarija denunciaron que sus hijas fueron víctimas de agresión sexual al interior del establecimiento.
Denuncian que el agresor es un niño de 12 años que cursa cuarto de primaria.
De acuerdo a los padres de familia las primeras denuncias señalan que el menor metió la mano debajo de las faldas de las menores, pero en el último caso señalan que junto a otros dos niños habrían encerrado en un curso a una niña, para luego uno de ellos quitarle la ropa y proceder al contacto físico.
La madre de una de las niñas, indicó a El Andaluz que el primer hecho se habría registrado en abril pasado, su hija fue agredida el pasado 19 de mayo (segundo caso).
Contó que la profesora de su hija la llamo para pedirle que se haga presente en la unidad educativa, cuando ella fue su hija le contó que en el recreo cuando fue al kiosco un niño se le acercó y le tocó en sus partes íntimas.
Indicó que la menor logró reconocer a su agresor al siguiente recreo y denunciaron a la directora de la unidad educativa, lo que había sucedió, ahí se enteró que no era la primera denuncia en contra del niño de 12 años.
La madre de la niña le pidió tomar cartas sobre el hecho suscitado al interior de la unidad educativa.
El caso se remitió a la Estación Policial Integral (EPI) Los Chapacos. Según cuenta la madre era un miércoles y le dijeron que la evaluación sicológica la harían recién el martes de la siguiente semana, por lo que ella decidió ir a oficinas de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia en donde le hicieron la evaluación sicológica al día siguiente.
La madre de la niña contó que cuando iba a consultar sobre los avances del caso, le indicaban que el niño era evaluado sicológicamente y que estaba yendo al Instituto Nacional de Prevención, Tratamiento y Rehabilitación de Drogodependencias y Salud Mental (INTRAID).
Para la madre, al parecer el tratamiento sicológico al menor no funcionó porque se registraron dos hechos posteriores al tratamiento.
Mencionó que la última vez que fue a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia y solicitó una copia simple del caso de su hija, le dieron una negativa, señalando que no puede salir ninguna información sobre niños de la Defensoría.
“No tengo ningún documento que pruebe que se hicieron acciones”, expresó.
Otros niños involucrados
El padre de familia de la niña, cuarta víctima de agresión sexual, indicó a El Andaluz que el hecho ocurrió en octubre pasado.
Remarcó que el niño tiene cuatro denuncias por este tipo de hechos.
Dijo que las anteriores denuncias fueron por toques impúdicos en contra de alumnas de segundo de primaria, pero en el caso de su hija estarían involucrados dos niños más de la misma edad del menor denunciado.
Según relato, la niña fue acorralada cuando estaba sola en su curso, los agresores tres niños.
El menor denunciado anteriormente fue quién habría cometido la agresión, mientras el segundo niño observaba y el tercero se quedó fuera del aula para avisarles si alguien iba al curso.
En este hecho, habrían incluso despojado de su ropa a la menor.
El padre de la víctima dijo que las cámaras de seguridad de la unidad educativa captan el momento en que los tres niños ingresaron al aula detrás de la menor y uno de ellos fue captado por la cámara al salir arreglándose el pantalón, después de la agresión.
La denuncia se hizo a la directora de la unidad educativa y el padre dijo que la directora le indicó que puso en conocimiento de la Dirección Distrital de Educación por lo ocurrido.
Señaló que a la fecha no se asumieron acciones ante las denuncias presentadas en contra del menor y cuando consultaron a la Dirección Distrital de Educación sobre el caso, les indicaron que no tenían conocimiento de esa situación.
Piden la expulsión del menor agresor
El padre de la cuarta víctima dijo que los padres de familia que denunciaron estos hechos piden que el menor ya no continúe en la unidad educativa.
“Queremos que ese niño ya no este en el colegio, en reiteradas veces esta haciendo este hecho”, expresó.
Menores circunstancialmente agresores
Al tratarse de menores de edad los denunciados, estos son inimputables, según la normativa boliviana.
El abogado Marco Antonio Cardozo que patrocina de manera gratuita a los padres de familia de las niñas que fueron victimas de agresión indicó que fueron cuatro niñas de segundo de primaria las víctimas de las agresiones del menor de 12 años, en el último caso se involucraron dos niños más.
El abogado explicó que este tipo de hechos se denominan como un caso de bullyng, violencia entre pares.
En este caso bullyng con agresión sexual en contra de cuatro menores de 7 años.
El menor agresor es inimputable y es considerado ante la Ley como un menor circunstancialmente agresor.
Si bien la normativa establece que no proceden las acciones penales en este tipo de casos, se debería haber orientado a los padres de familia sobre los pasos que pueden seguir, pero no se lo hizo de esa manera.
Remarcó que si bien no se conseguirá una sentencia en el sistema judicial, se pueden aplicar medidas de protección para las víctimas y sanciones para el menor agresor, cuando la violencia se da dentro del sistema educativo.
Cardozo indicó que la directora de la unidad educativa supuestamente habría puesto en conocimiento de la Dirección Distrital esta situación, pero cuando desde la Defensoría de la Niñez se llamó a la Dirección Distrital les indicaron que no tenían conocimiento de las denuncias.
El abogado aclaró que los derechos no son absolutos y que en este caso el derecho a la educación del menor, no puede estar por encima del derecho a la libertad sexual de las niñas víctimas.
Explicó que en estos casos cuando se trata de violencia entre pares, se pueden aplicar sanciones administrativas, en este caso la expulsión del menor.
Indicó que la Sentencia Constitucional 0469/2019-S2 del 9 de julio, señala que en caso de violencia entre pares, bullyng con agresión sexual, no corresponde una persecución pública y penal, pero si corresponde a través de las autoridades una sanción administrativa, en este caso dijo que es la expulsión.
Fuente: Andaluz