El caso del ciudadano venezolano hallado sin vida dentro de una maleta a orillas del río Piraí ha tomado un nuevo rumbo judicial. Su expareja, Denise Paola Martines, también de nacionalidad venezolana, fue enviada con detención preventiva por 180 días a la cárcel de Palmasola, mientras el Ministerio Público profundiza las investigaciones sobre el crimen.
De acuerdo con el fiscal Franz Delgadillo, la medida fue determinada por la autoridad jurisdiccional luego de que Martines incurriera en contradicciones durante su declaración y se detectaran mensajes sospechosos que habría intercambiado con miembros de una organización criminal internacional.
“La autoridad jurisdiccional ha determinado la aplicación de la medida excepcional de detención preventiva por el lapso de 180 días”, confirmó el fiscal.
Martines, quien residía en Perú, llegó a Bolivia presuntamente a pedido de la familia del fallecido. No obstante, su comportamiento generó sospechas, pues parecía conocer detalles del asesinato sin haberlo denunciado a las autoridades.
El Ministerio Público ha tipificado su posible participación en los delitos de encubrimiento y organización criminal. Además, se investiga a la actual pareja del fallecido, quien habría salido del país en días recientes.
Las autoridades no descartan que este crimen tenga vínculos internacionales, y continúan explorando todos los móviles posibles, dado el alto grado de violencia y la forma en la que fue hallado el cuerpo: torturado, maniatado y encerrado en una maleta.