El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, afirmó este lunes que las 17 personas deportadas por Estados Unidos al país centroamericano son «asesinos» y «delincuentes de alto perfil». La deportación se llevó a cabo en un operativo militar conjunto entre ambos gobiernos y los acusados fueron trasladados a una cárcel de máxima seguridad.
El Gobierno de EE.UU. anunció la medida a través de un comunicado del secretario de Estado, Marco Rubio, señalando que los deportados están vinculados a las bandas criminales Tren de Aragua (TdA) y MS-13. Se trata de una acción similar a la realizada el pasado 15 de marzo, cuando más de 200 venezolanos fueron expulsados de manera sumaria y entregados a las autoridades salvadoreñas.
Bukele confirmó la operación en su cuenta de X: «Anoche, en un operativo militar conjunto con nuestros aliados de Estados Unidos, trasladamos a 17 criminales extremadamente peligrosos vinculados al Tren de Aragua y la MS-13». Además, aseguró que «todos los individuos son asesinos confirmados y delincuentes de alto perfil, incluidos seis violadores de niños». Sin embargo, no presentó pruebas para respaldar dichas afirmaciones.
La deportación ocurre en medio de la controversia por la invocación de la ley de Enemigos Extranjeros por parte del expresidente Donald Trump. Esta normativa de 1798, no utilizada desde la Segunda Guerra Mundial, permite expulsar a extranjeros sin una audiencia judicial previa, argumentando que el Tren de Aragua representa una amenaza para EE.UU. A pesar de que un juez federal bloqueó su aplicación el mismo día en que fue anunciada, las deportaciones han continuado.
Hasta el momento, el Gobierno salvadoreño no ha proporcionado detalles sobre el estado de los deportados ni su situación legal dentro del país.