El diputado Gualberto Arispe, perteneciente al ala evista del Movimiento al Socialismo (MAS), defendió la presencia de grupos organizados que custodian los accesos a la sede de las seis federaciones de cocaleros en Shinahota, Cochabamba. Según Arispe, estos grupos armados con palos y barricadas actúan dentro de un marco legal y tienen como propósito proteger a Evo Morales.
“En nuestro criterio, (la presencia de esos grupos) es legal. En los congresos y ampliados nos organizamos, hay delegados que se constituyen para resguardar el evento. En este caso, es una vigilia que viene a resguardar la vida del hermano Evo y, por supuesto, están muy organizados”, declaró el legislador.
Desde el 16 de octubre de 2024, Morales no ha salido del trópico cochabambino y permanece en la sede de las seis federaciones de cocaleros en Shinahota, donde también opera la radio Kawsachun Coca, medio desde el cual transmite sus programas.
Arispe también reveló que la Policía se encuentra en la zona cumpliendo sus funciones habituales y sugirió que algunos efectivos intentaron infiltrarse en la denominada “guardia pretoriana” de Morales. “La Policía está ahí, a pocos metros, en Shinahota. La Policía tiene funciones específicas y eso debe cumplir”, afirmó.
El domingo se cumplieron cuatro meses desde que se emitió la primera orden de aprehensión contra Morales y hasta ahora la Policía no ha logrado ejecutarla. Hace una semana, un juez en Tarija ordenó nuevamente su captura.
El 27 de octubre, un operativo policial intentó cercar a Morales, pero el exmandatario logró evadir la acción. Desde entonces, los grupos que lo custodian han reforzado su seguridad, instalando barricadas y controles estrictos a quienes desean ingresar a la zona.
Según testimonios de dirigentes que han visitado a Morales, los controles son minuciosos y se han detectado intentos de infiltración. El propio Morales denunció que una cadete de la Policía fue descubierta por campesinos y entregada a sus superiores en la localidad.