Una trágica historia ha causado indignación en Seattle, Estados Unidos, luego de que se revelara que Denaya Young, una madre de 29 años, golpeó a su hijo de 14 años hasta causarle la muerte, todo porque el menor no había terminado su tarea escolar.
El pasado jueves, Young llamó al 911 informando que su hijo, identificado como J.R., dejó de moverse tras recibir una brutal golpiza con un cable alargador durante varias horas. Al llegar la policía, la mujer admitió haber perdido el control y haber golpeado a su hijo más veces de las que podía recordar.
El informe policial detalla que Young empujó violentamente al menor contra una pared, provocándole una lesión en la cabeza que lo dejó inconsciente. A pesar de esto, continuó golpeándolo mientras yacía en el suelo.
El reporte médico forense reveló que el adolescente presentaba 1,172 heridas en su cuerpo, incluyendo marcas, cortes y contusiones. La causa de la muerte fue un shock distributivo, una condición que impide que el cuerpo suministre suficiente sangre al corazón debido al grave daño sufrido.
«Cada vez que se ponía de pie, se caía, pero pensé que me estaba tomando el pelo (…) en las últimas caídas, se golpeó la cabeza contra algo», confesó la mujer a los oficiales.
El caso ha generado una ola de indignación en la comunidad y en redes sociales, donde exigen justicia para el menor. Young enfrenta cargos por homicidio y podría recibir la pena máxima por este crimen.