La Intendencia Municipal de Tarija, en colaboración con la Guardia Municipal, ha llevado a cabo un operativo dentro de los establecimientos educativos para identificar y decomisar productos perjudiciales para la salud de los estudiantes. Durante este operativo, se descubrió que algunos kioscos escolares estaban vendiendo cigarrillos y productos de origen chino, catalogados como severamente dañinos.

Zulma Miranda, responsable de Inocuidad Alimentaria de la Intendencia, informó que los quioscos infractores fueron notificados y que los productos peligrosos fueron decomisados. Entre los artículos encontrados, se incluyen cigarrillos y gelatinitas que, a pesar de estar prohibidos debido a sus riesgos, seguían siendo vendidos en los colegios. La venta de estos productos, además de representar un peligro para la salud, se realiza sin información clara sobre los ingredientes, ya que muchos de los productos importados de China carecen de etiquetas en español, lo que dificulta la evaluación de su seguridad.

“Existen productos que no cuentan con ninguna información en español, lo que hace imposible determinar si son aptos para el consumo o si presentan riesgos a la salud”, comentó Miranda. Asimismo, destacó el caso de las gelatinitas, cuya venta fue prohibida después de que un menor perdiera la vida debido a una broncoaspiración.

El operativo responde a las preocupaciones de los padres de familia y maestros, quienes han solicitado controles más estrictos para garantizar la seguridad de los estudiantes. La Intendencia ha asegurado que los operativos continuarán hasta el final del ciclo escolar para garantizar que no se sigan comercializando estos productos nocivos en el entorno escolar.

Este operativo refleja el compromiso de las autoridades municipales para proteger la salud de los estudiantes y asegurar que los establecimientos educativos sean espacios seguros para el desarrollo de los jóvenes. Se hace un llamado a la comunidad educativa a colaborar en la vigilancia de estos establecimientos y a seguir denunciando cualquier irregularidad que ponga en riesgo a los estudiantes.

La Intendencia Municipal de Tarija, en colaboración con la Guardia Municipal, ha llevado a cabo un operativo dentro de los establecimientos educativos para identificar y decomisar productos perjudiciales para la salud de los estudiantes. Durante este operativo, se descubrió que algunos kioscos escolares estaban vendiendo cigarrillos y productos de origen chino, catalogados como severamente dañinos.

Zulma Miranda, responsable de Inocuidad Alimentaria de la Intendencia, informó que los quioscos infractores fueron notificados y que los productos peligrosos fueron decomisados. Entre los artículos encontrados, se incluyen cigarrillos y gelatinitas que, a pesar de estar prohibidos debido a sus riesgos, seguían siendo vendidos en los colegios. La venta de estos productos, además de representar un peligro para la salud, se realiza sin información clara sobre los ingredientes, ya que muchos de los productos importados de China carecen de etiquetas en español, lo que dificulta la evaluación de su seguridad.

“Existen productos que no cuentan con ninguna información en español, lo que hace imposible determinar si son aptos para el consumo o si presentan riesgos a la salud”, comentó Miranda. Asimismo, destacó el caso de las gelatinitas, cuya venta fue prohibida después de que un menor perdiera la vida debido a una broncoaspiración.

El operativo responde a las preocupaciones de los padres de familia y maestros, quienes han solicitado controles más estrictos para garantizar la seguridad de los estudiantes. La Intendencia ha asegurado que los operativos continuarán hasta el final del ciclo escolar para garantizar que no se sigan comercializando estos productos nocivos en el entorno escolar.

Este operativo refleja el compromiso de las autoridades municipales para proteger la salud de los estudiantes y asegurar que los establecimientos educativos sean espacios seguros para el desarrollo de los jóvenes. Se hace un llamado a la comunidad educativa a colaborar en la vigilancia de estos establecimientos y a seguir denunciando cualquier irregularidad que ponga en riesgo a los estudiantes.

La Intendencia Municipal de Tarija, en colaboración con la Guardia Municipal, ha llevado a cabo un operativo dentro de los establecimientos educativos para identificar y decomisar productos perjudiciales para la salud de los estudiantes. Durante este operativo, se descubrió que algunos kioscos escolares estaban vendiendo cigarrillos y productos de origen chino, catalogados como severamente dañinos.

Zulma Miranda, responsable de Inocuidad Alimentaria de la Intendencia, informó que los quioscos infractores fueron notificados y que los productos peligrosos fueron decomisados. Entre los artículos encontrados, se incluyen cigarrillos y gelatinitas que, a pesar de estar prohibidos debido a sus riesgos, seguían siendo vendidos en los colegios. La venta de estos productos, además de representar un peligro para la salud, se realiza sin información clara sobre los ingredientes, ya que muchos de los productos importados de China carecen de etiquetas en español, lo que dificulta la evaluación de su seguridad.

“Existen productos que no cuentan con ninguna información en español, lo que hace imposible determinar si son aptos para el consumo o si presentan riesgos a la salud”, comentó Miranda. Asimismo, destacó el caso de las gelatinitas, cuya venta fue prohibida después de que un menor perdiera la vida debido a una broncoaspiración.

El operativo responde a las preocupaciones de los padres de familia y maestros, quienes han solicitado controles más estrictos para garantizar la seguridad de los estudiantes. La Intendencia ha asegurado que los operativos continuarán hasta el final del ciclo escolar para garantizar que no se sigan comercializando estos productos nocivos en el entorno escolar.

Este operativo refleja el compromiso de las autoridades municipales para proteger la salud de los estudiantes y asegurar que los establecimientos educativos sean espacios seguros para el desarrollo de los jóvenes. Se hace un llamado a la comunidad educativa a colaborar en la vigilancia de estos establecimientos y a seguir denunciando cualquier irregularidad que ponga en riesgo a los estudiantes.