Sandra Gutiérrez ha asumido nuevamente el cargo de Fiscal Departamental de Tarija en una conferencia de prensa que se caracterizó por aplausos y preguntas de los medios. Su retorno se produce tras su destitución por iniciar una investigación sobre una denuncia de trata y tráfico de personas que involucra al expresidente Evo Morales. «Como ustedes verán, me encuentro sola, sin resguardo de policías ni funcionarios de la Fiscalía, porque cuando uno trabaja apegado a la ley, siempre puede andar con la cabeza en alto,» declaró Gutiérrez al iniciar su intervención.
La restitución de Gutiérrez se logró luego de que la presidenta nacional de Derechos Humanos de Bolivia presentara una acción de libertad en La Paz, la cual fue revisada el pasado sábado. «El juez determinó que mi destitución fue ilegal y arbitraria, lo que demuestra que no cometí ningún error al investigar el caso,» añadió la fiscal. Sin embargo, lamentó que los otros dos fiscales que conformaban su equipo de investigación no hayan sido restituídos.
Gutiérrez enfatizó la existencia de una «masacre blanca» contra aquellos que formaron parte del equipo investigador de Morales, señalando que esta situación no solo fue una injusticia hacia ella, sino hacia todo el equipo que se atrevió a iniciar la denuncia.
Además, expresó su preocupación por el contexto que ha rodeado este caso, resaltando el impacto negativo que tiene en la percepción de justicia en Bolivia. «Este retorno me deja un sabor amargo, porque, aunque yo he sido restituida, la situación de mis colegas refleja un panorama sombrío para la independencia judicial,» concluyó Gutiérrez.
