Un nuevo y misterioso giro se dio en el caso del asesinato del coronel Juan Javier Soliz Cáceres, comandante del Regimiento Manchego de Montero, ocurrido el 30 de mayo. Este lunes, una carta anónima fue dejada en su domicilio mediante un dron, y el mensaje ha generado preocupación en las autoridades.
Según el fiscal departamental Alberto Zeballos, el mensaje impreso decía:
“No sigan operando en el Chapare o de nuevo enviaremos más gente”.
Esta amenaza está siendo analizada como parte de las hipótesis sobre las posibles causas del asesinato, aunque de momento no se descartan móviles personales, pasionales o económicos.
Los investigadores han realizado diversas diligencias, incluyendo:
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Registro del lugar del hecho.
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Levantamiento legal del cadáver.
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Toma de declaraciones a militares, médicos y familiares.
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Secuestro de cinco armas de fuego y varios celulares de soldados, testigos y centinelas.
El examen forense reveló que el coronel falleció por un trauma craneoencefálico grave, compatible con el impacto de un proyectil de arma de fuego de grueso calibre.
Además, se tomarán pruebas de absorción atómica y se harán pericias químicas y tecnológicas para identificar si alguna de las armas secuestradas fue utilizada en el crimen.
Este martes, la Fiscalía y el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) realizarán una inspección ocular en el regimiento para reconstruir el hecho, determinar la posición de víctima y victimario, y recolectar nuevos elementos. Se contará con el apoyo de peritos en criminalística.
También se han recolectado libros de novedades sobre altas, bajas y armamento, además de revisar la restricción de circulación nocturna vigente en el recinto militar.
Las autoridades aseguran que el objetivo es llegar a la verdad histórica del hecho y dar con autores, cómplices o encubridores.