El viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, denunció este viernes que las movilizaciones de sectores afines a Evo Morales, registradas en inmediaciones del Tribunal Supremo Electoral (TSE), fueron incentivadas con pagos económicos y que durante las protestas se utilizó dinamita.
En conferencia de prensa, Aguilera señaló que “se cancela, ya sea en efectivo o mediante boletas, a quienes asisten a estas movilizaciones”, dejando en claro que no se trata de protestas espontáneas, sino de acciones coordinadas con fines políticos.
Durante el operativo policial del jueves, 26 personas fueron aprehendidas, entre ellas un hombre acusado de recolectar y distribuir dinero entre los manifestantes. Se reportó además que varios portaban cachorros de dinamita y agredieron a efectivos policiales, algunos de los cuales fueron internados en el Hospital Policial por lesiones.
Los delitos por los que se procesará a los detenidos incluyen tráfico ilícito de explosivos, lesiones graves y leves, atentado contra miembros de seguridad del Estado, y destrucción de bienes públicos y nacionales.
“Estos actos no corresponden a una manifestación pacífica. Generan zozobra y ponen en riesgo la seguridad ciudadana”, remarcó Aguilera. Aunque aseguró que el derecho a la protesta está garantizado por la Constitución, afirmó que “no se puede criminalizar la protesta, pero tampoco permitir su uso como instrumento de desestabilización”.
Las protestas se focalizan en las sedes del TSE en La Paz, Cochabamba y Santa Cruz. En Cochabamba, se denunció que personas del Trópico fueron obligadas a participar bajo amenaza de sanciones económicas.
Finalmente, la Policía continúa desplegada para garantizar la libre circulación y el abastecimiento de productos, ante el riesgo de bloqueos.