Este jueves, el centro de la ciudad de La Paz amaneció nuevamente bloqueado por cooperativistas mineros de los nueve departamentos del país, quienes se mantienen en vigilia en inmediaciones de la avenida Camacho y la calle Loayza. Exigen al Gobierno atención inmediata a sus demandas, entre ellas, la distribución regular de diésel y material explosivo necesario para sus labores extractivas.
Las tensiones aumentaron tras los enfrentamientos de la noche del miércoles, cuando la Policía gasificó a los manifestantes. Según los mineros, la movilización fue pacífica y solo se utilizaron petardos, no dinamita como en otras oportunidades. Sin embargo, afirman que, ante la represión, podrían radicalizar sus medidas.
“Estamos muy molestos, porque anoche estábamos pacíficamente, nosotros no usamos explosivos, pero fuimos gasificados. Ahora posiblemente lo utilizaremos”, declaró uno de los dirigentes del sector.
Los mineros han advertido que llegarán refuerzos desde otros departamentos y que emitirán un ultimátum al Gobierno. A pesar de que el Ejecutivo ha convocado al diálogo, los cooperativistas condicionan su participación a la presencia del presidente Luis Arce Catacora. De no concretarse esta reunión, advirtieron con intensificar las protestas y tomar medidas más drásticas.