La Policía continúa con las investigaciones en torno al robo de 300.000 bolivianos ocurrido en una vivienda del municipio de La Guardia. Los afectados, una familia de comerciantes que se encontraba de viaje, descubrieron el delito al regresar y encontrar las puertas de su casa abiertas.
De acuerdo con el informe preliminar, ya se identificó a uno de los principales sospechosos. Sin embargo, debido a la confidencialidad de la investigación, los detalles de su identidad se mantienen en reserva.
Efectivos policiales han desplegado operativos en la región con el objetivo de capturar al sospechoso y esclarecer los hechos. La propietaria del inmueble fue quien notificó el robo tras su retorno, encontrando el lugar en evidente desorden.
Se espera que en las próximas horas se emita un informe oficial con más detalles sobre este caso que ha generado preocupación en la comunidad.