Este lunes, 21 personas fueron arrestadas por los destrozos e intento de toma de la sede de la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Cochabamba (Fsutcc) por parte de un grupo de campesinos y cocaleros afines al Movimiento al Socialismo (MAS).
El conflicto, que surgió debido a una disputa interna por la directiva de la Federación, escaló cuando manifestantes intentaron tomar las oficinas ubicadas en la calle Junín, en el centro de la ciudad. Un contingente policial resguardaba el lugar y utilizó agentes químicos para dispersar a los manifestantes, resultando en enfrentamientos que dejaron daños materiales, incluido un vehículo policial con vidrios rotos y otros desperfectos.
Desde la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, se señaló que algunos de los detenidos declararon haber sido obligados a participar en la marcha. Por su parte, sectores afines al MAS calificaron los arrestos de injustificados y denunciaron represión policial. La senadora Lucy Escobar afirmó que hubo personas heridas durante los enfrentamientos, quienes fueron trasladadas a centros médicos para su atención.
Representantes de las 16 provincias del departamento se declararon en emergencia y establecieron una vigilia permanente en la plazuela Corazonistas, exigiendo la liberación de las 21 personas arrestadas, entre las que se encuentran 14 hombres y 7 mujeres.
Familiares de los detenidos acudieron a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) para obtener información sobre su situación. “No estábamos haciendo nada. Los trajeron llorando. Mi esposa está ahí. Nos dijeron que estarán por ocho horas”, relató uno de los familiares presentes.
El caso continúa generando tensión en la ciudad, mientras las autoridades investigan lo sucedido.