El viernes 6 de diciembre, un operativo conjunto realizado por la Policía Anticorrupción, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), autoridades de Gobierno y la Fiscalía provocó una ola de protestas en Montero, Santa Cruz. La intervención, destinada a frenar la especulación de precios del arroz, resultó en el decomiso de grandes cantidades del grano y el precintado de cinco ingenios arroceros, generando tensiones entre trabajadores y propietarios del sector.
Según el fiscal asignado al caso, las acciones se llevaron a cabo bajo la sospecha del delito de agio, ya que se constató la presencia de grandes cantidades de arroz almacenadas en los ingenios mientras que los mercados enfrentaban escasez del producto.
“Estamos realizando el precintado, y se ha abierto una investigación por agio, ya que en algunos mercados no hay arroz, y evidenciamos que en los ingenios arroceros sí hay este producto”, explicó el fiscal.
Sin embargo, los propietarios rechazan estas acusaciones. “Me están quitando mi arroz, me están quitando mi ingenio. No estoy cometiendo ningún delito”, expresó uno de ellos. Por su parte, una propietaria aseguró: “Lo que queremos es abastecer al pueblo, no especular ni ocultar el arroz. Debemos tener unos 400 quintales almacenados”.
La tensión escaló cuando unas 200 personas, entre trabajadores y vecinos, lograron retirar los precintos de uno de los depósitos, forzando a funcionarios de EMAPA y efectivos policiales a retirarse debido a la creciente violencia de las manifestaciones.
El operativo busca responder al incremento de precios del arroz en los mercados, donde un quintal puede superar los 400 bolivianos. No obstante, el sector arrocero argumenta que la situación perjudica su economía y la de cientos de familias.
La Fiscalía ha informado que la investigación continúa y que se tomarán medidas en caso de confirmarse prácticas de agio o especulación.