La Policía Forestal y de Preservación del Medio Ambiente (Pofoma) y la Fiscalía llevaron a cabo un operativo en una vivienda de la zona Cotahuma, en La Paz, tras recibir una denuncia de maltrato animal el 2 de diciembre. Durante el allanamiento, las autoridades encontraron 11 gatos muertos dentro de un refrigerador y otros cuatro en avanzado estado de descomposición en un baño.
El lugar, que aparentaba funcionar como un refugio improvisado, estaba bajo el cuidado de una mujer que recolectaba animales. Además de los restos encontrados, se logró el rescate de 19 perros y 25 gatos que estaban en condiciones diversas. Estos animales serán sometidos a evaluaciones veterinarias para determinar su estado de salud.
El fiscal Ronald Jurado confirmó que la mujer fue aprehendida y será investigada por el delito de biocidio, el cual se define en la legislación boliviana como la muerte intencional de animales.
Las autoridades destacaron que los animales rescatados recibirán la atención necesaria mientras se avanza en el caso para determinar las responsabilidades correspondientes. Este caso ha generado indignación entre organizaciones defensoras de los derechos de los animales, quienes exigen sanciones ejemplares para evitar que estas situaciones se repitan.