El pasado 11 de octubre, Día de la Mujer Boliviana, los comunarios de la reserva natural de Tariquía denunciaron haber sido abandonados por las autoridades en su lucha por proteger la reserva de actividades extractivas. A pesar de la férrea oposición de los habitantes de la zona, incluidas muchas mujeres, efectivos policiales ingresaron a la reserva para permitir el acceso de una empresa dedicada a la exploración y explotación de recursos.
Los comunarios expresaron su indignación, señalando que, a pesar de haber manifestado repetidamente su rechazo a estas actividades, sus peticiones no han sido escuchadas por las autoridades. Consideran que su resistencia no solo es una lucha local, sino una batalla por el medio ambiente y el futuro de la región, que afecta a todo el país.
A pesar de la intervención policial y la presencia de la empresa en la reserva, los habitantes de Tariquía han reafirmado su compromiso de seguir defendiendo este importante ecosistema, reconocido por su riqueza ecológica. Para ellos, proteger Tariquía es proteger el patrimonio natural de Bolivia, y han hecho un llamado a la población y a las organizaciones ambientales para unirse a su causa.
Los comunarios insisten en que la reserva está en peligro por las actividades extractivas, y temen que, si no se toman medidas urgentes, el impacto sobre la biodiversidad y las comunidades locales será irreversible.