El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha emitido una fuerte advertencia a Irán tras un reciente ataque con misiles, que las autoridades israelíes atribuyen a Teherán. “Cometió un grave error y pagará por ello”, declaró Netanyahu, en un mensaje que subraya la creciente tensión entre ambos países.
Netanyahu calificó el ataque como una provocación directa, afirmando que Israel no permitirá que se queden impunes los actos que pongan en peligro la seguridad de la nación. “Mantendremos las reglas que establecimos: quien nos ataque, lo atacaremos”, enfatizó el primer ministro.
Este ataque por parte de Teherán es considerado el más grave contra el Estado judío y se interpreta como una represalia por el asesinato de Hasan Nasralá, líder de Hezbolá. Su muerte ha elevado las tensiones en la región, llevándola a una de sus mayores escaladas.
Por su parte, la Guardia Revolucionaria de Irán ha amenazado con una “respuesta aplastante” si el gobierno de Netanyahu decide tomar represalias por el ataque. La situación se complica aún más con el aumento de las tensiones internas en Israel, evidenciadas por un reciente tiroteo en Tel Aviv, que la policía investiga como un acto de terrorismo, dejando un saldo de muertos.
El panorama en Oriente Próximo se presenta incierto, con una escalada militar que amenaza con desbordar las fronteras de Israel y afectar la estabilidad regional.
