Una mujer de 31 años de edad perdió la vida tras acudir a un curandero en lugar de buscar asistencia médica adecuada para tratar los fuertes dolores que sufría en el bajo vientre. Por más de dos meses, la víctima fue tratada por el curandero, sin que su condición mejorara.
José Antonio Pardo, director del Hospital Maternológico de Cochabamba, relató que la paciente llegó en estado crítico al Hospital Materno «Germán Urquidi» con fiebre y signos de un deterioro grave de salud. «La mujer ya no tenía pulso cuando llegó al hospital», explicó Pardo.
Pese a los esfuerzos del equipo médico, la paciente falleció en la sala de operaciones debido a una perforación intestinal. Según el esposo de la víctima, ella había acudido repetidamente a un curandero en busca de alivio antes de que decidieran llevarla al hospital, cuando ya era demasiado tarde.
Pardo hizo un llamado a las autoridades para investigar si estos curanderos están legalmente autorizados para ofrecer tratamientos médicos o diagnósticos complejos. «No estamos en contra de los curanderos, pero hay límites. Este tipo de situaciones deberían ser reguladas y sancionadas cuando corresponda», señaló el médico.
El caso ha generado preocupación sobre la práctica de acudir a curanderos para el tratamiento de enfermedades graves, una opción que, en este caso, resultó en la pérdida de una vida.
