El lunes 16 de septiembre, cuatro campesinos pertenecientes a la Federación Departamental Única de Trabajadores Campesinos fueron aprehendidos en un punto de bloqueo en la carretera hacia Desaguadero, en el departamento de La Paz. Según el viceministro de Seguridad Ciudadana, Roberto Ríos, los detenidos enfrentan cargos por cinco delitos: alzamiento armado contra la seguridad y soberanía del Estado, instigación pública a delinquir, terrorismo, tenencia y portación pública de armas de fuego, y atentado contra la seguridad de los servicios públicos.
La aprehensión se produjo luego de la viralización de un video en el que se observa a personas encapuchadas, portando armas de grueso calibre y vistiendo ponchos rojos. Aunque inicialmente el bloqueo era el foco de las acciones policiales, el viceministro Ríos afirmó que la investigación ahora se centra en el contenido del video, que sugiere una amenaza a la estabilidad del país.
“El ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, ha instruido la investigación tras la difusión del video, que muestra un posible alzamiento armado de los Ponchos Rojos”, declaró Ríos.
Este caso ha generado preocupación entre las autoridades y la opinión pública, quienes ven en estos hechos una posible escalada de violencia en el contexto político-social del país.