Un alarmante caso de abandono infantil sacude a Cochabamba. Un niño de 10 años con deficiencias intelectuales fue dejado a su suerte en una habitación durante casi una semana, sin acceso a comida ni agua. La madre del menor cerró la puerta del domicilio con candados, dejándolo completamente aislado.
El rescate del niño fue posible gracias a la intervención de los vecinos, quienes alertaron a las autoridades. La Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) junto a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia actuaron de inmediato para liberar al menor de su confinamiento.
Tatiana Herrera, directora de Género Generacional de la Alcaldía, describió la escena como desgarradora. «Es un pequeño de 10 años con un retraso considerable. Era una habitación pequeña y el niño gritaba. Se rompieron los candados y vimos un panorama triste. Había muchísimo desorden, no había alimentos, no había líquido. Este niño habría sobrevivido más de tres días,» informó Herrera.
Las condiciones en las que vivía el menor eran deplorables. Según Herrera, el niño se veía obligado a hacer sus necesidades en un tacho dentro de la habitación. Tras el rescate, el menor fue internado para recibir atención médica, donde su estado de salud sigue siendo evaluado.
Este no es el primer incidente de maltrato infantil en esta familia. La madre ya tenía antecedentes por maltratar a otro de sus hijos, quien finalmente decidió irse a vivir con otros familiares. Además, la hija menor de la mujer, de cuatro años, fue trasladada a un albergue por su seguridad.
«La madre tiene antecedentes y su otra hija pequeña fue llevada a un albergue. Tiene otro hijo de 17 años que a principios de año se fue a vivir con otro familiar,» explicó Herrera.
La mujer ahora enfrentará un proceso legal por abandono de menores y negligencia materna, mientras que el menor rescatado permanece bajo estricta observación médica. Este caso pone de manifiesto la urgencia de una mayor vigilancia y protección para los niños que viven en situaciones de vulnerabilidad extrema.
