Este viernes se llevó a cabo un allanamiento en el domicilio de un obispo emérito en el municipio de San Ignacio de Velasco, departamento de Santa Cruz, como parte de una investigación por el delito de legitimación de ganancias ilícitas. Durante el operativo se incautaron varios elementos para avanzar en las indagaciones, mientras que las autoridades expresaron preocupación por la cantidad de propiedades que posee este individuo.
El fiscal Gustavo Ríos informó que el obispo emérito cuenta con un patrimonio valuado en aproximadamente 14 a 15 inmuebles, así como distintos flujos económicos bancarios que no concuerdan con su perfil socioeconómico. En este contexto, se inició una investigación de oficio y se ejecutó una orden de allanamiento para recabar más evidencia.
Además de los inmuebles, se señala que el obispo emérito tendría más de 10 vehículos, y durante el allanamiento se secuestró documentación relevante y dinero, con el objetivo de identificar a posibles implicados en el caso.
Sin embargo, el investigado calificó el allanamiento como un «abuso», alegando que ha vivido en Bolivia durante 50 años y ejerció como obispo en San Ignacio durante 30 años.